"La ética en la formación de los administradores" Resumen capítulo 7 "Ética y Empresa"

La formación de ética no debe comenzar al entrar a una empresa, las personas que actuarán como directivos, los empleados y los accionistas, deberán tener herramientas necesarias para poder actuar con ética, como bien comenta Gilli, la formación empieza desde el hogar y en la educación primaria, sin embargo dicho argumento no da pié a que las personas que están formándose para incursionar en el ámbito profesional, no sigan preparándose para tener una vida profesional y personal cargada de valores.

Se considera importante el hecho de reflexionar, y este punto es vital en el desarrollo de profesionistas éticos, el no caer en el impulso, el poder hacer un balance antes de tomar determinada acción es fundamental para  poder fomentar valores, será importante que los administradores puedan darse tiempo de PENSAR antes de actuar, y de que al momento de PENSAR puedan hacerlo desde un concepto ético.

Es solamente a través de la reflexión el hecho de que una persona puede llegar a generar conciencia, y dicha conciencia lo convertirá en una persona madura que podrá tener coherencia en lo que piensa y lo que hace, pues la reflexión hará buscar lo que se quiere y poder vivir bajo una vivencia de virtudes, sólo así se alcanzará la felicidad, entendida como una felicidad integral, es decir, incluyendo el ámbito personal y profesional.

Como Gilli apunta de una manera extraordinaria, no es el caso de evitar el desarrollo tecnológico, más bien, se debe tener ética en las aplicaciones de dicho desarrollo, dicho esquema recuerda a Alfred Nobel, que al haber  creado la “dinamita” se dio cuenta que el uso de la dinamita no solo se usaba para abrir paso y construir caminos, sino para matar personas en las guerras, al sentirse culpable, creó los premios que llevan su apellido y que se le otorgan a los más importantes científicos y humanistas del mundo.

No es de extrañarse, que Alfred Nobel no creó de la dinamita para su uso en las guerras, la creación de la dinamita marcó un hito en la construcción y en el desarrollo de infraestructura, pero fue la aplicación en las guerras la que le dio a esa nueva tecnología un aspecto negativo, coincido con Gilli y con los grandes filósofos en que el desarrollo de la técnica, la concepción de tecnología es neutral, dependerá de su uso, dependerá de cómo se use y también de quién lo haga.

Es importante tener un análisis de porqué las empresas usan como mera estrategia mercadotécnica el uso de sus códigos de ética, y es porqué en ellas pueden legitimar su derecho de beneficiarse en la comunidad, pues son “inversionistas de los valores humanos de su sociedad”, además de que la sensación que le ofrecen al público de ser socialmente responsable es un gran inventivo para consumir su producto o servicio.

El impacto de ver un producto diciendo que al consumir dicho producto, un porcentaje de las ventas se usará para beneficiar a una casa hogar, reforestar una zona dañada o equipar computadoras en una escuela pública, contribuye en mucho la decisión de una persona al momento de la elección, pues el consumidor, sabiendo (porque así se lo han inculcado) que es causante de muchos problemas en la naturaleza y en la sociedad, sentirá alivio de que está contribuyendo a una “noble” causa, sin siquiera alterar su vida diaria, en la que no sabe si en verdad dicho porcentaje en irá a parar ahí, intuyendo que existen medios reguladores de dichas campañas sin siquiera saber cuáles son, o cuáles son sus mecanismos de monitoreo.

Es este preocupante engaño el que incentiva a la empresa en crear fundaciones, apoyar proyectos altruistas, o simplemente manejar el concepto de una empresa donde se fomentan valores. Muchas empresas solo se preocupan por mantener su imagen, que sean del agrado de sus consumidores, sin siquiera tomar en cuenta que el manejo de acciones éticas en todo momento.

Como se ha comentado en trabajos anteriores, el desarrollo de códigos de ética en el comportamiento de los trabajadores, lamentablemente no se lleva a la práctica, es solo un acto de mucha incongruencia en muchas empresas, éstas no han estado dispuestas a invertir en el monitoreo de actos no éticos, no lo hacen hasta que se descubren irregularidades, tal es el caso de Walmart y la creación del área de anticorrupción después de haberse encontrado en casos de corrupción con autoridades Mexicanas.

La búsqueda del apego total a los códigos de conducta, no deberían tomarse como un mero papel, una simple imagen extra que se tiene para ir a la moda en la actualidad, deberían tomarse como una verdadera inversión para la confianza tanto del gobierno y la sociedad donde interactúan, además de un incentivo para sus accionistas, donde estarán seguros de invertir conociendo que la reputación de la empresa estará intacta, pero siempre será vigilada.

Es importante reconocer los esfuerzos de las universidades por fomentar la aplicación de la ética en sus estudiantes, es preocupante que, siendo la corrupción y el manejo no ético de la administración empresarial, las principales causas de la profunda crisis mundial, la gran mayoría de universidades no tomen en cuenta dichos aspectos y no tomen en cuenta el estudio de temas referenciados a la ética como prioritarios.

Es grato saber que poco a poco las universidades van integrando temáticas referenciados a la ética dentro de la administración, sin embargo aún es muy ineficiente el hecho de no tener simuladores de conducta o aplicaciones de modelos de directivos éticos, dichas aplicaciones deberían estar en las universidades y en las empresas como un cierto examen de confianza. Hoy en día lo que se tienen son meros estudios teóricos y ejemplos que si bien pueden llevar a la reflexión, no ponen a prueba al estudiante en desafíos tan grandes como un cheque que contienen muchos dígitos.

Es exactamente éste punto donde se entrelaza el capítulo 7 de Gilli con las lecturas anexas, es ahí donde el gobierno corporativo toma importancia, desde el momento en que se educa a los directivos a orientar sus valores personales con los valores que impone el código de ética, obrando por el bien común de la empresa en su totalidad.

Como una posible estrategia para fomentar la ética en los administradores, considero los siguientes puntos:

1. La conciencia a través de la empatía, esto es, los estudiantes deben conocer el entorno que les rodea, los estudiantes como obligación tendrían que ir a alguna zona en estado de miseria, los estudiantes podrían reflexionar de una manera práctica, los resultados de una administración sin valores.
2. Se dan como ejemplo siempre a las personas o empresas que defraudan, que son corruptas y que tienen una habilidad impresionante en el engaño (El caso Parmalat como discusión del foro es un ejemplo), sin embargo no se considera muchas veces a las personas o empresas incorruptibles, con altos valores cívicos y creadoras de mecanismos innovadores para el fomento de valores.
3. Los estudiantes podrían ser de una manera, incentivados en participar en ONGs respetables, donde puedan llevar a cabo proyectos que beneficien a una comunidad determinada, de esta manera, no solo practican todo lo estudiado durante su carrera como administradores, también son enriquecidos con altos contenidos de valores que generarán conciencia en ellos.

En un país, México; donde muchas empresas tienen el objetivo de quebrar para que el gobierno las rescate, que aprovechan los huecos fiscales para evadir la mayor cantidad de impuestos, que se aprovechan del compadrazgo para ganar licitaciones, lavan dinero y/o conocen la tarifa estandarizada de corrupción de cualquier tipo; debería ser una obligación el monitoreo constante del sector empresarial, además también deberían de ser obligatorias las materias de ética empresarial en las universidades, no solo para las carreras administrativas sino para todas las demás, no se podrá tener una empresa corrupta cuando los médicos y/o ingenieros son corruptos.

Se debería generar un modelo directivo que no sea astuto para buscar lo mejor para la directiva, pensando en cada acto, reunión o asamblea en la generación de más riqueza monetaria; más bien debería ser astuto para buscar lo mejor para la empresa en todo su concepto, es decir, lo mejor para los empleados, directivos, accionistas y también lo mejor para la sociedad donde interactúa.

Las empresas deberían comprender que ahora mismo, en una época donde la empresa es la plataforma en la cual gira el ser humano(se educa desde la primaria para poder adaptarse a un ambiente laboral, se construye infraestructura para que las personas puedan ir a su trabajo, se crean instituciones como el IMSS o el ISSSTE para atender la salud de los empleados, se fomenta el emprendurismo para generar más empresas y así más empleos y flujo de dinero), tiene una oportunidad impresionantemente única para trascender y crear una plataforma de bienestar y productividad del ser humano, poder atender las necesidades del género humano en su totalidad. Dicha oportunidad no se está aprovechando, pues no se ha actuado con valores, ni se ha orientado a la empresa a tener el objetivo del bien común.

La oportunidad de trascender aún no se ha acabado, por lo que sería un excelente tiempo de que el sistema empresarial pudiera reflexionar en que la empresa nació para el bienestar humano, y que el ser humano NO nació para el bienestar del sistema empresarial.

Conclusión

Considero necesario que exista una formación en ética más eficiente, no solo llevándolo al ámbito teórico, creo que sería más eficiente si se puede hacer cuestionar más al estudiante sobre temas que repercuten sobre los actos de corrupción.

Creo también que no se deberían de deducir impuestos cuando una empresa invierte en responsabilidad social, no creo que sea un regalo el hecho que una empresa gaste en una fundación, creo que como partes fundamentales de la sociedad, es una obligación contribuir a ésta.

Creo que todas las empresas pueden ser éticas, lo que les hace falta, es que sus directivos, o accionistas piensen que al hacer un acto corrupto, por mínimo que éste pudiera ser, están orillando al mundo a un retroceso, las empresas que hoy trabajan en base a actos no éticos, no se dan cuenta que la verdad siempre sale a la vista, aunque tarde 15 años en ser descubierta (como en el caso Parmalat), tampoco se dan cuenta que al actuar en un acto no ético, los directivos, accionistas y/o empresarios dejan de ser personas dignas para su cargo, denigran su reputación y por lo tanto, pierden la maravillosa oportunidad de trascender.

Bajo mi experiencia en la carrera de Ingeniería en Comunicaciones y Electrónica, me era muy triste analizar que mis compañeros tomaban inadvertidos las materias de humanidades, tachándolas “de chocolate”, al analizarlo, pude comprender que en lo personal fueron las materias más importantes para mi desarrollo profesional, y considero que lo seguirán siendo, pues no se puede concebir a un buen ingeniero, sin altos grados de ética.
Bibliografía.
Gilli, Juan José (2011). Ética y Empresa. Buenos Aires, Argentina. Granica